La hora de irse a dormir es un momento de reflexión. Unos segundos, minutos u horas de autoevaluación en la que valoramos lo que ha pasado durante el día. Dicen, que en este momento en que nos encontramos cara a cara con nosotros mismo, solo damos vueltas a aquello que hemos hecho mal, a aquello que podríamos haber hecho mejor. Nuestro subconsciente hace aflorar todas nuestras dudas y inseguridades… ¿He hecho aquello que se esperaba de mi? ¿Lo tendría que haber hecho? ¿Qué deben haber pensado los demás?
Nosotras, proponemos hacer el ejercicio al revés. ¿Qué hemos hecho bien durante el día? ¿En qué momento nos hemos sentido a gusto con nosotras mismas?
Confiar en uno mismo y tomar conciencia de aquello que hemos hecho bien es la base de una buena autoestima. Por lo tanto, antes de dormirte recuerda los buenos momentos que has pasado hoy, aquello que te ha gustado y de lo que puedes estar orgullosa.
Buenas noches. Morronguito
